Aunque las hojas otoñales crean un ambiente festivo estacional, muchos no se dan cuenta del daño que las hojas amontonadas pueden causar a su coche. <br /><br />Los expertos en automoción recomiendan a los propietarios que retiren las hojas caídas de sus vehículos de forma segura para eliminar los restos sin causar más daños. <br />Al humedecerse las hojas, los hongos, la savia de los árboles y otros subproductos ácidos pueden provocar daños permanentes en la superficie de su coche. <br /><br />Estos compuestos pueden penetrar en la capa transparente del vehículo, haciendo que la pintura se descascarille y se produzcan manchas. Cuando la capa transparente está dañada, el óxido puede corroer el coche. <br /> Según James Naylor, asesor de proyectos de Eastwood Automotive, «una buena capa de cera crea una barrera que ayuda a evitar que la savia y los ácidos de las hojas penetren en la capa transparente». <br /><br />Las hojas también pueden obstruir los limpiaparabrisas, las tomas de aire y las juntas del techo solar, provocando fugas y fallos de funcionamiento, que con el tiempo resultan más difíciles de eliminar. <br /><br />Los palos y los tallos de las hojas también pueden causar daños, ya que pueden arañar cualquier superficie del coche, desde los cristales hasta los parachoques de plástico. <br /> Los arañazos pueden empeorar si las hojas se retiran sin cuidado. Los expertos recomiendan retirar las hojas a mano (con guantes de jardinería) o con sopladores de hojas suaves. <br /><br /> También es importante abrir el capó y retirar los restos que se acumulen en la base del parabrisas. <br /> Adoptar el hábito de retirar diariamente de la superficie del coche las hojas y cualquier otro resto, como palos o recortes de hierba, hará más evitable cualquier daño o complicación. <br /><br /> El frío dificulta la eliminación regular de los restos otoñales, pero el lavado de coches puede ayudarle a mantener su vehículo en perfecto estado.
