La violenta manifestación dejó un saldo preocupante de disturbios y enfrentamientos. La marcha, que inicialmente se presentó como una protesta por los derechos de los jubilados, fue cooptada por grupos violentos que generaron caos en la ciudad. La policía intervino para controlar la situación, resultando en varios heridos y detenidos. Este evento ha desatado un debate sobre el manejo del orden público y la respuesta política ante tales situaciones. La sociedad argentina se encuentra dividida entre quienes apoyan las medidas de seguridad y quienes critican la represión policial.
