Contexto Previo<br />El Tenerife, dirigido por Álvaro Cervera, llegaba al encuentro tras una victoria importante en casa frente al Cádiz (1-0) en la jornada anterior, lo que había reavivado las esperanzas de permanencia entre su afición. Sin embargo, el equipo insular ocupaba la posición 20 de la clasificación con 28 puntos, a 12 puntos de la salvación, con solo 10 jornadas restantes en el campeonato. Su balance hasta ese momento era de 7 victorias, 7 empates y 19 derrotas, con 30 goles a favor y 48 en contra. Como local, había mostrado cierta solidez con 7 triunfos, pero necesitaba sumar de a tres para mantener viva la lucha por evitar el descenso.<br />Por su parte, el Granada CF, bajo las órdenes de Fran Escribá, venía de un triunfo clave ante el Real Oviedo (1-0), que lo había colocado en la pelea por los puestos de promoción. Situado en la 8ª posición con 49 puntos, el equipo nazarí estaba a solo dos puntos de la sexta plaza, ocupada por el playoff. Con 13 victorias, 10 empates y 10 derrotas, y un registro ofensivo de 50 goles a favor por 42 en contra, el Granada buscaba consolidar su buen momento y aprovechar su condición de favorito en un partido que, sobre el papel, parecía asequible. Sin embargo, su irregularidad como visitante (5 victorias, 4 empates y 7 derrotas) y el precedente del Cádiz, que había caído en el Heliodoro la semana anterior, eran una advertencia.<br />Historial y Claves<br />En el duelo de la primera vuelta, disputado el 19 de octubre de 2024 en el Nuevo Los Cármenes, el Granada se impuso con un contundente 4-0, gracias a dobletes de Myrto Uzuni y Lucas Boyé. Este resultado reflejaba la superioridad histórica reciente del conjunto andaluz sobre el Tenerife, con 5 victorias en los últimos 9 enfrentamientos directos, frente a solo una del equipo chicharrero. No obstante, el Tenerife había mostrado signos de mejoría con Cervera, especialmente en casa, donde su afición y la urgencia podían ser factores determinantes.<br />Las claves del partido pasaban por la capacidad del Tenerife para aprovechar su intensidad como local y la necesidad de mejorar su efectividad ofensiva, liderada por jugadores como Enric Gallego o Luismi Cruz. Para el Granada, la solidez defensiva y el acierto de sus hombres de ataque, como Lucas Boyé o Abde Rebbach, serían fundamentales para contrarrestar la presión insular y aprovechar los espacios al contraataque.<br />Expectativas<br />El encuentro se presentaba como un choque de necesidades: el Tenerife, aferrándose a una remontada casi milagrosa para salvar la categoría, y el Granada, con la obligación de no tropezar en un "partido trampa" para mantenerse en la lucha por el ascenso. La previa apuntaba a un duelo intenso, con el equipo local buscando dar un golpe sobre la mesa y el visitante intentando imponer su calidad para dormir en puestos de playoff. El resultado final dependería de cómo ambos equipos gestionaran los momentos clave y las emociones de un partido decisivo para sus respectivos objetivos.