Como director del "Blas Infante" de Écija desde hace 17 años, Delgado habló con conocimiento de causa sobre el panorama actual. Reconoció que el cuerpo directivo afronta un problema grave: "Hay comunidades con hasta un 60% de plazas vacantes y los directores tienen que ser, entre comillas, impuestos. "A esto se suma una falta de reconocimiento salarial, pues "un director puede duplicar o triplicar la responsabilidad de un docente con un complemento de solo 200 o 300 euros."<br /><br />Aunque el País Vasco ha avanzado en la mejora salarial, con incrementos del 15 al 20% en complementos que pueden llegar a 800 o 900 euros al mes en centros grandes, Delgado señaló que estas medidas deben ser modelo a seguir pero con una base clara: "Hay que definir un modelo de profesionalización y carrera profesional."<br /><br />Profesionalización y liderazgo pedagógico<br /><br />Delgado explicó que Fedeip apuesta por un modelo que contemple un proceso formativo y de experiencia para la dirección. La carrera debe permitir escalar desde tutor hasta director, con competencias bien definidas. Criticó el actual modelo excesivamente administrativo, que limita el liderazgo pedagógico: "No podemos tener un director para todo, sino centrar el liderazgo en la pedagogía."<br /><br />Resaltó que es fundamental que los directores mantengan el vínculo con el aula, para no perder el contacto con la realidad educativa: "Un buen director no debería perder la realidad de lo que pasa en el aula." Para ello, propuso que la parte administrativa sea asumida por personal de gestión, liberando al director para centrarse en la función pedagógica.
