El gobierno de Nayib Bukele aprobó una ley que exonera de impuestos a inversionistas extranjeros cuyo capital supere los 2 mil millones de dólares. Estos beneficiarios no pagarán impuestos sobre ganancias, compra de propiedades ni importación de insumos, con el objetivo de atraer inversión y dinamizar la economía. Sin embargo, la medida ha generado críticas, ya que perjudica a pequeños comerciantes y emprendedores salvadoreños. teleSUR