La residencia de Beatriz Gutiérrez Müller en Madrid genera dudas sobre transparencia y recursos. Aunque asegura seguir en la CDMX, no aclara si se mudará a España ni con qué dinero viviría en uno de los barrios más lujosos. La opacidad sobre sus declaraciones patrimoniales abre sospechas, mientras surgen preguntas sobre la educación de su hijo en la Universidad Complutense y la congruencia política de la 4T.
