El habitáculo del 849 Testarossa representa una síntesis magistral entre la configuración horizontal de una berlina y la envolvente funcionalidad de una cabina monoplaza. La parte superior del salpicadero incorpora molduras plásticas con efecto flotante, acompañadas por rejillas enmarcadas en una estructura de aluminio que delinean un distintivo motivo en forma de «C», aportando profundidad visual y sofisticación técnica. Entre la sección superior e inferior se extiende una banda horizontal en contraste, que integra los mandos principales y la pantalla dedicada al pasajero, reforzando la simetría funcional del conjunto. En la parte inferior, dos velas arquitectónicas albergan las funciones de control, destacando en posición flotante una rejilla inspirada en el F80, que añade un guiño estético al legado deportivo de la marca.<br /><br />La arquitectura del túnel central ha sido rediseñada con un enfoque racional y minimalista, redistribuyendo las funciones secundarias para lograr una mayor claridad funcional. La vela del túnelse proyecta hacia el panel lateral, integrando un woofer de aluminio que también incorpora el tirador pullcap o tirador de la manilla de la puerta. Entre ambos elementos, perfectamente armonizados, se ubican los mandos de apertura, reforzando la continuidad visual y ergonómica del conjunto.
