Las farmacias de Vallecas se han convertido en los últimos meses en objetivo de los llamados "robos a la carta", en los que ladrones sustraen productos muy concretos para revenderlos después en mercadillos clandestinos.<br /><br />Uno de los casos más recientes lo sufrió Rosalía, farmacéutica del barrio, a la que le sustrajeron 17 cremas solares valoradas en 444 euros en apenas 30 segundos.<br /><br />Los botines más habituales incluyen protectores solares, cosmética facial y artículos de parafarmacia de alto precio, que son fáciles de colocar en la reventa ilegal.<br /><br />Ante esta oleada, muchas farmacias están reforzando sus sistemas de seguridad, instalando botones del pánico y mejorando la videovigilancia. Además, los profesionales han creado un grupo de WhatsApp en el que se alertan mutuamente de “clientes sospechosos” para intentar frenar a los delincuentes reincidentes.
