La Justicia comenzó a peritar los teléfonos celulares de los imputados, donde se investiga información encriptada y posibles mensajes borrados que podrían vincular a “Pequeño J” con Matías Osorio, señalado como uno de sus laderos.<br /><br />En paralelo, Pequeño J permanece detenido en Perú, bajo custodia de la Superintendencia de Drogas y no en una cárcel común, mientras se avanza en el proceso de extradición a la Argentina. Las autoridades extremaron medidas de seguridad ante el temor de que integrantes de la banda intenten rescatarlo.<br /><br />Fuentes judiciales indicaron que detrás de la organización criminal operaban familiares directos y que existen al menos dos estructuras narco enfrentadas por el control territorial, algunas ligadas a la histórica 1-11-14.
