Cuando Carl, el marido de Harriet, que es policía, le dice a Balki que va a hacer algo esa noche en un bar, le pide que no lo divulgue. Larry, pensando que va a hacer una gran redada, engaña a Balki para que le diga dónde es, con el fin de conseguir la exclusiva. Lo que no saben es que se trata de una fiesta sorpresa. Cuando llegan allí y ven a un funcionario público, piensan que es corrupto y que Carl va a detenerlo.
