El joven de 26 años fue asesinado durante un control policial y se convirtió en una nueva presunta víctima de gatillo fácil. El director de Prevención, comisario Carlos Cáceres, indicó que en total hay seis agentes policiales a disposición de la justicia para las investigaciones correspondientes. “Quiero justicia para mi hijo, él era un tipo trabajador, honesto. Nunca piso una comisaría”, Juan Ortigoza, padre de la víctima.
