Cuatro camionetas presuntamente usadas por criminales al servicio de Felipe Santiago Acosta Riveros, alias Macho, para atacar a tiros un helicóptero militar, fueron encontradas a cinco kilómetros del lugar del tiroteo. Los vehículos presentan impactos de bala y dos tenían rastros de sangre, por lo que se sospecha que habría heridos o muertos entre los narcos.
