<p>El jugador de Al-Nassr, Sadio Mané, es uno de los jugadores africanos mejor pagados del mundo. Sin embargo, destina parte de su fortuna en mejorar los servicios de su pueblo en Senegal. Ha construido escuelas, hospitales, oficinas de correos e incluso llevado la conexión 4G a aldeas rurales. Además, proporciona una media de 100 dólares a familias para ayudarles con sus necesidades básicas.</p><br>
