De acuerdo a la segunda de las acepciones del diccionario de la RALE, la envidia se puede encuadrar dentro de la emulación o deseo de poseer algo que otro posee. Siendo en este caso que lo envidiado no es un sujeto sino un objeto material o intelectual. Por lo tanto en esta segunda acepción la base de la envidia sería el sentimiento de desagrado por no tener algo y además de eso el afán de poseer ese algo. Esto puede llegar a implicar el deseo de privar de ese algo al otro en el caso de que el objeto en disputa sea el único disponible. La Envidia es considerado como un pecado capital porque genera otros pecados, otros vicios; El término "capital" no se refiere a la magnitud del pecado sino a que da origen a muchos otros pecados y rompe con el amor al prójimo que proclama Jesús. San Gregorio Magno (540 en Roma – † 604), 64 Papa de la Iglesia católica romana; fue quien selecciono los siete pecados capitales, y se mantuvo por la mayoría de los teólogos de la Edad Media.