Normativa obliga a 'etiquetar' la información que podría provocar miedo, justificar la violencia o incitar al uso de las drogas<br />Con el objetivo de proteger a los menores, las autoridades rusas obligan a los medios de comunicación a advertir sobre "la información peligrosa" que emiten. Esta normativa insta a definir varios grupos en pos de la edad y a marcar las escenas indeseables, incluyendo los dibujos animados<br />Así, bajo la nueva ley, que entró en vigor en Rusia el 1 de septiembre, ‘South Park’ y ‘Los Simpson’, entre otros dibujos animados, serán mostrados solamente después de las 23:00, mientras que otros, como la famosa serie estadounidense 'Itchy&Scratchy' estará prohibida en principio hasta octubre, aunque no se sabe si finalmente será emitida en el país<br />“Tenemos derecho a cambiar las series y las películas y adecuarlas a la legislación. Es una situación común. Son muchos países y las exigencias difieren de uno a otro en lo que se refiere al contenido que sale en la televisión. Por eso en los contratos hay una cláusula que permite adecuar las series a la legislación de un país concreto”, explica Lev Makarov, director general del canal televisivo ruso ‘2х2’ Esta normativa también obliga a 'etiquetar' la información que podría provocar miedo, justificar la violencia o incitar a usar drogas. Así por ejemplo, las películas y los programas de televisión tendrán que establecer el límite de edad, según su contenido: + 6, +12, +16 y +18<br />“Desde el punto de vista psicológico no hay duda que la información visual, en un contexto determinado, de una u otra manera influye en los niños. Con frecuencia crecemos tomando como ejemplo a los personajes de las películas y los dibujos animados. Es más nos identificamos con uno de los personajes. Y si los adultos pueden diferenciar lo bueno de lo malo, los niños no ven esta línea y asumen todos los papeles, sean buenos o malos”, sostiene el psicólogo Iliá Shabshin<br />INDIGNACIÓN SOCIAL<br />Sin embargo, esta ley ya ha generado una ola de críticas, especialmente por la posibilidad de que se prohíban los famosos dibujos animados de la época soviética que han divertido a varias generaciones<br />Mientras unas cadenas de televisión están dispuestas a cumplir esta normativa, otras están a la espera de enmiendas y formulaciones más precisas. “Las formulaciones son ambiguas. Cada uno entiende esta ley a su manera. Ahora se trata de elaborar una plataforma única para que los medios y las cadenas puedan entender igual esta ley, para que puedan hacer sus recomendaciones”, opina Makarov<br />La nueva ley, además, se extiende al espacio virtual. Sin embargo, todavía no está claro de qué manera se podría aplicar la normativa en la red<br />Y mientras los medios esperan explicaciones sobre esta ley, se crea una situación bastante controvertida. Aunque algunos se devanan los sesos pensando con qué sustituir los famosos dibujos animados, todavía queda a disposición de los niños información de todo tipo a la que pueden acceder con un simple ‘click’
