Al Qarra – El 29 de Noviembre de 2011, el rey Mohamed VI nombro Abdelilah Benkirane a la cabeza del ejecutivo marroquí. Un año después, es hora de un balance. Se trata del primer gabinete en ejercer el poder tras el cambio de constitución en 2011. Teniendo su cargo, la interpretación legal de las nuevas disposiciones de esta constitución. Sobre ese punto, Abdelilah Benkirane avanza con cautela.<br /><br />Hamid Barrada, Periodista<br /><br />« Para poner en aplicación la constitución, existen leyes orgánicas. Benkirane no hizo gran cosa. El es muy prudente. En mi opinión, el no hace nada, por que su preocupación es otra. Él busca a todo precio tener relaciones privilegiadas con palacio. Como las leyes orgánicas podrían hacer girar por definición sus relaciones con palacio – ya que quitan poderes al palacio- esa no es su prioridad.<br /><br />En el plano económico, un buen numero de promesas fueron olvidadas. Abdelilah Benkirane creó mucha expectativa sobre la lucha contra el desempleo de los jóvenes diplomados. Sin embargo un acuerdo entre su predecesor y varias asociaciones de diplomados desempleados, fue dejado de lado. Ahora que trataba del empleo para centenas de entre ellos.<br /><br />Otro expediente en espera, es el de la moralización de la vida publica. Todos los procesos legales estaban en marcha mucho antes de la llegada del nuevo ejecutivo.
